Eres un idiota. Siempre hablas de más y no piensas en las consecuencias de tus palabras. Maldito bocazas. No conseguirás tus objetivos si vas bajándote los pantalones y desvelando tus secretos a los demás. Deberías cuidar tu lengua. A nadie le importa lo que vas a hacer o lo que piensas sobre esto o lo otro.
Pídeles perdón.